Pronto serán dos años de vivir en Brasil y llegó el momento de comenzar a compartir mis experiencias, desde las más cotidianas hasta las más complejas.

“Necesito volver a estudiar estadística pero de ya”, pensé hace algunos días mientras me encontraba frente a un puñado de datos en una hoja de Excel. “Tengo que llegar a un análisis más profundo”, continué pensando mientras las gráficas que salían de esa maraña de datos le daban respuestas limitadas a mis cuestionamientos.

Logré concluir el análisis, no del todo como lo quería en ese momento, pero con eso di por finalizada la jornada, cerré la computadora y salí de la oficina. Tomé el camino de siempre para llegar a casa (que es corto).  Al llegar prendí mi computadora y comencé a navegar entre las carpetas del Drive donde tengo almacenados bastantes documentos de la universidad.

No encontré lo que buscaba: Aquellos fragmentos del libro con el que se me enseñó sobre  correlatividad y regresión no estaban por ningún lado. Sin embargo, permanecí un buen rato entrando de carpeta en carpeta, con mucha añoranza y con la sensación de quien mira al pasado con satisfacción.

Allí estaban: las prácticas del laboratorio de diseño en las que vectorizaba el “Morro Dois Irmãos” visto desde Ipanema, la presentación sobre música brasileña para la materia de análisis y expresión verbal en la que la única instrucción que importaba era “elijan un tema que les apasione”. También estaban las fotos de Chico Buarque que servían para practicar las técnicas de retoque en Photoshop del taller de fotografía y cada uno de los trabajos para la clase de portugués.

Y yo, yo estaba aquí: a más de dos años de distancia de esos momentos, en donde mi realidad actual, era meramente un anhelo: vivir en Brasil.

Pronto serán dos años viviendo en Brasil. Dos ¿de cuántos? La verdad no lo sé. Hay días que siento que serán muchos, hay otros que me pienso aquí para toda la vida y otros en los que quisiera despertar en México.

Lo que sí sé es que estoy viviendo algo con lo que soñé durante mucho tiempo. Pero no sólo se trata de soñar, sé que a este sueño lo ha forjado la dedicación, el trabajo y también los privilegios.

Vivo el sueño y no precisamente el americano y de eso quiero contarles.

Hace días vi que una amiga (saludos Gloria) subió un video con la intención de compartir sus experiencias de viaje. La verdad, al igual que Gloria, yo también he pensado hacer esto desde hace bastante tiempo y de alguna manera, ella me dio el empujoncito que necesitaba para comenzar a compartir cómo es vivir en Brasil.

Como escucharon al inicio de este video, pronto voy a cumplir dos años viviendo en Brasil y cómo no sé por cuánto tiempo estaré acá, si este llega a ser más corto de lo planeado, quiero comenzar a compartir mis experiencias viviendo en Brasil: desde las cosas más cotidianas, hasta aquello que me hace querer con todo mi corazón a este país.

Mi intención es que puedan conocer cómo más sobre un país hermoso del que en México sabemos bien poco y por qué no, que un que otro brasileño también pueda conocer la belleza de nuestra cultura mexicana.

Muchas gracias por ver este video y leerme. Pronto estaré platicando más por acá.

Até mais!